Hace 5 años, Emmanuelle y Thierry decidieron comprar un catamarán de vela LUCIA 40 a Canet Boat Plaisance. Fountaine Pajotde los que somos distribuidores.
Se lanzaron a la aventura este año, con el Rallye des Iles du Soleil, y comparten con nosotros su llegada a Marie-Galante, así como su opinión sobre su barco.
Una aventura estimulante y humana
La seguridad y la organización ocuparon un lugar destacado en el orden del día, lo que apreciaron mucho. Estuvieron supervisados durante todo el rally, antes, durante y después. Esta organización les permitió sentirse seguros y parte de una verdadera familia.
De hecho, el Rallye des Iles du Soleil no es sólo una experiencia de navegación, sino también una aventura humana. Las tripulaciones han forjado amistades maravillosas. Emmanuelle y Thierry partieron como simples conocidos, pero al cabo de un mes se convirtieron en verdaderos amigos de los demás miembros de su tripulación. La proximidad a bordo creó fuertes lazos que les permitieron conocerse intensamente.
Una llegada histórica a Marie-Galante
La llegada a Marie-Galante fue un momento inolvidable. El barco de los organizadores recibió a los participantes a primera hora de la mañana. En tierra, la calurosa acogida de los lugareños y las fiestas dejaron recuerdos preciosos.
La isla conquistó a los participantes por su belleza y tranquilidad. Sus magníficas bahías constituyeron una experiencia memorable.
El Lucia 40, un catamarán ideal para la aventura
Para Emmanuelle y Thierry, el Lucía 40 ha sido un aliado inestimable durante esta travesía. Les gusta mucho su barco, que consideran marinero, rápido y fácil de manejar, y que les da confianza.
Invertir en un spinnaker resultó innecesario: la configuración básica del barco, complementada con un gennaker, es más que suficiente. El spinnaker sigue siendo una opción agradable, pero no imprescindible.
Esta experiencia única, tanto en términos humanos como náuticos, ha dejado algunos recuerdos preciosos.
Para ellos, el Rallye des îles du Soleil fue mucho más que una travesía: fue una auténtica aventura que reforzó su pasión por la vela.
Enhorabuena a Emmanuelle y Thierry, y gracias por compartir sus opiniones con nosotros.